INTRODUCCIÓN
Buenos días. En esta nueva
entrada del blog, hablaremos sobre la hora del cuento. La hora del cuento es
muy importante en educación infantil ya que, es la manera de introducir a los
niños a la literatura. Aunque, bien es cierto que los niños no están
acostumbrados a estar sentados y escuchar, esta es una muy buena forma de que
se vayan acostumbrando; pero sin contarle un cuento muy largo que se les haga
largo; únicamente lo suficiente para que estén tranquilos y disfruten de la
hora del cuento.
Para este trabajo, tuvimos que
elegir entre las tres modalidades de transmisión literaria: cuentacuentos,
lectura y narración. En mi caso, elegí el cuentacuentos.
-
El cuentacuentos: En él se
cuentan cuentos folclóricos, porque como vimos en el bloque anterior, los
cuentos folclóricos se cuentan sin libro. Este es el método que hice yo en la
actividad, que más adelante explicaré.
-
Narración con libro: Lo principal
característica de esta técnica es que se van contando las ilustraciones, no es
una lectura.
-
La lectura: cuando realizamos la
lectura de un libro tenemos un papel muy importante, ya que nos volvemos el
intermediario entre el texto y los oyentes.
JUSTIFICACIÓN
Elegí el cuentacuentos porque
creo que es algo que a los niños les gusta, aunque no tenga imágenes porque se
hace sin ayuda del libro (Es lo que le diferencia de las otras modalidades de
transmisión; la lectura y la narración); pero creo que es ideal para que la
imaginación de los niños vuele y disfruten al máximo.
Conté el cuento de “Los siete
cabritillos y el lobo”, una versión de los hermanos Grimm, de un cuento con
algunas recopilaciones de estos autores que tengo en casa. La edad que les dije
a las compañeras a las que le conté el cuento, es la de 3 años; aunque
realmente creo que cualquier edad vale; puesto que es un cuento sencillo y que
a los niños no les da especialmente miedo, pues tiene un final feliz.
RESUMEN INTRODUCCIÓN
Buenos días. En esta nueva
entrada del blog, hablaremos sobre la hora del cuento. La hora del cuento es
muy importante en educación infantil ya que, es la manera de introducir a los
niños a la literatura. Aunque, bien es cierto que los niños no están
acostumbrados a estar sentados y escuchar, esta es una muy buena forma de que
se vayan acostumbrando; pero sin contarle un cuento muy largo que se les haga
largo; únicamente lo suficiente para que estén tranquilos y disfruten de la
hora del cuento.
Para este trabajo, tuvimos que
elegir entre las tres modalidades de transmisión literaria: cuentacuentos,
lectura y narración. En mi caso, elegí el cuentacuentos.
-
El cuentacuentos: En él se
cuentan cuentos folclóricos, porque como vimos en el bloque anterior, los
cuentos folclóricos se cuentan sin libro. Este es el método que hice yo en la
actividad, que más adelante explicaré.
-
Narración con libro: Lo principal
característica de esta técnica es que se van contando las ilustraciones, no es
una lectura.
-
La lectura: cuando realizamos la
lectura de un libro tenemos un papel muy importante, ya que nos volvemos el
intermediario entre el texto y los oyentes.
JUSTIFICACIÓN
Elegí el cuentacuentos porque
creo que es algo que a los niños les gusta, aunque no tenga imágenes porque se
hace sin ayuda del libro (Es lo que le diferencia de las otras modalidades de
transmisión; la lectura y la narración); pero creo que es ideal para que la
imaginación de los niños vuele y disfruten al máximo.
Conté el cuento de “Los siete
cabritillos y el lobo”, una versión de los hermanos Grimm, de un cuento con
algunas recopilaciones de estos autores que tengo en casa. La edad que les dije
a las compañeras a las que le conté el cuento, es la de 3 años; aunque
realmente creo que cualquier edad vale; puesto que es un cuento sencillo y que
a los niños no les da especialmente miedo, pues tiene un final feliz.
RESUMEN
El resumen del cuento es el
siguiente: En una casita vivían siete cabritillos hermanos y su mamá. Un día la
mamá se tiene que ir de casa, porque tiene que ir a comprar, y a su pesar;
tiene que dejar a sus hijos solos en casa. Antes de irse, les avisa de que, si
llaman a la puerta, tienen que asegurarse de que no sea el lobo y que eso es
fácil de reconocer, pues el lobo tiene la voz muy grave y las pezuñas negras.
Les dijo que siempre tenían que pedir que metiese la pezuña por debajo de la
puerta, y si estaban seguros de que no era el lobo, y de que es ella (la
madre), abrir. Los cabritillos lo entendieron muy bien y le dijeron a su mamá
que se fuese tranquilamente. Pero enseguida llego el lobo que llamo a la puerta
y los cabritillos, reconocieron que era el lobo por su grave voz. El lobo, para
corregir este error comió un poco de tiza que suaviza la voz, y lo intentó una
tercera vez. Tampoco tuvo éxito pues los cabritillos le pidieron que asomase la
pezuña por debajo de la puerta y ésta era negra. El lobo, fue al panadero y le
pidió que le pusiese masa y harina para hacer su pata más blanca. El panadero
al principio no quiso porque sabia que iba a engañar a alguien; ero el lobo le amenazó
con comérselo a él y no tuvo más remedio que hacer lo que el lobo dijo. El lobo
lo intento por una tercera vez y, al tener la voz suave y la pezuña blanca; los
cabritillos pensaron que era su mamá y cuando abrieron la puerta y vieron al
lobo, todos tuvieron que esconderse en diferentes partes de la casa. El lobo se
los fue comiendo mientras los iba encontrando, salvo al más pequeño que se
escondido detrás de un reloj y no lo encontró, pero el lobo con seis
cabritillos tenía suficiente; asique se fue a echar la siesta al prado. Cuando
llegó la madre y vio que el lobo se había comido a sus hijos se puso a llorar,
pero salió el pequeño detrás del reloj y juntos fueron a salvar al resto de
cabritillos a la pradera. Mientras el lobo dormía, la mama y el pequeño
tuvieron la idea de abrir al lobo mientras estuviese dormido, sacar a los
cabritillos y en su lugar meter piedras para que pensase que seguía con los
cabritillos en el estómago. Poco a poco, fueron sacando a todos los cabritillos
hasta que ya no quedo ni uno, y entre todos metieron las piedras dentro de la
barriga del lobo y le cosieron. Cuando se despertó el lobo de la siesta, se
sintió muy hinchado y fue a beber agua al río y del peso de las piedras se cayó
al agua y ahogo. Y así fue como los cabritillos vivieron felices y la aldea se
quedó sin lobo.
PREGUNTAS DESPUES DEL CUENTO
Después de contarles este cuento
les haría unas preguntas como por ejemplo; si les ha gustado el cuento, qué ha
sido lo que más les ha gustado, qué hubiesen hecho ellos si entra el lobo a
casa, qué hubiesen hecho si fueran el cabritillo pequeño y cómo se imaginan a
los personajes.
Para prepárame la actividad, me
leí varios cuentos de los hermanos Grimm (Hansel y Grettel, Caperucita…) pero
este fue el que más me gusto, porque creo que no es tan conocido como otros. Se
lo conté a mi hermana una vez y me dijo que, para hacerlo mejor, podía cambiar
las voces al hacer de lobo con la voz grave, y luego el lobo con la voz dulce
cuando come tiza; para que los niños perciban la diferencia. También me dijo
que podía hacer ruidos con la mesa cuando llaman a la puerta (toc, toc, toc) y hacer como que asomaba
la patita por debajo de la puerta. Le volví a hacer la representación con sus
correcciones y me dijo que le gustó mucho.
APORTACIONES A LA ACTIVIDAD EN CLASE
Luego, en la actividad de clase
me hicieron distintas aportaciones. La primera vez que hice la lectura, me
dijeron que podría dejar más pausas concretamente después de contar algo
importante (esperar dos segundos y seguir) y me pusieron de ejemplo cuando el
lobo consigue entrar a la casa de los cabritillos. También me dijeron que podría
hacer una introducción hablando de la casa de los cabritillos, de la aldea…
para poner a los niños en situación.
La segunda vez que hice la
lectura, me dijeron que les gustó mucho la entonación, como lo conté, las
pausas para que puedan seguir la historia, los sonidos para introducirles en el
cuento. También me dijeron que podría preguntar sobre el molinero, sobre qué
les parece su actuación.
La tercera vez que hice la
lectura, lo hice con una de las chicas con las que lo había hecho la primera
vez (no se podía hacer de otra forma en ese momento) y me dijo que había
mejorado mucho desde la primera vez. En esta tercera vez no me dijeron nada
especial.
CONCLUSIÓN
En conclusión, la practica de
contar cuentos me parece bastante interesante porque así aprendemos con se puede
hacer mejor, quitarnos los “nervios” de las primeras veces y también ver como
realizan nuestras compañeras las lecturas y las narraciones de libros.
También he de decir, que he
aprendido también las otras dos estrategias que no hice yo para contar cuentos
en clase. Me parece que la realización de esta actividad y ver como mis
compañeros lo hacían ha sido fundamental para ello. Me parece necesario
utilizar las tres estrategias para que los niños las disfruten y vean las
diferencias de cada una de ellas.
RESUMEN
El resumen del cuento es el
siguiente: En una casita vivían siete cabritillos hermanos y su mamá. Un día la
mamá se tiene que ir de casa, porque tiene que ir a comprar, y a su pesar;
tiene que dejar a sus hijos solos en casa. Antes de irse, les avisa de que, si
llaman a la puerta, tienen que asegurarse de que no sea el lobo y que eso es
fácil de reconocer, pues el lobo tiene la voz muy grave y las pezuñas negras.
Les dijo que siempre tenían que pedir que metiese la pezuña por debajo de la
puerta, y si estaban seguros de que no era el lobo, y de que es ella (la
madre), abrir. Los cabritillos lo entendieron muy bien y le dijeron a su mamá
que se fuese tranquilamente. Pero enseguida llego el lobo que llamo a la puerta
y los cabritillos, reconocieron que era el lobo por su grave voz. El lobo, para
corregir este error comió un poco de tiza que suaviza la voz, y lo intentó una
tercera vez. Tampoco tuvo éxito pues los cabritillos le pidieron que asomase la
pezuña por debajo de la puerta y ésta era negra. El lobo, fue al panadero y le
pidió que le pusiese masa y harina para hacer su pata más blanca. El panadero
al principio no quiso porque sabia que iba a engañar a alguien; ero el lobo le amenazó
con comérselo a él y no tuvo más remedio que hacer lo que el lobo dijo. El lobo
lo intento por una tercera vez y, al tener la voz suave y la pezuña blanca; los
cabritillos pensaron que era su mamá y cuando abrieron la puerta y vieron al
lobo, todos tuvieron que esconderse en diferentes partes de la casa. El lobo se
los fue comiendo mientras los iba encontrando, salvo al más pequeño que se
escondido detrás de un reloj y no lo encontró, pero el lobo con seis
cabritillos tenía suficiente; asique se fue a echar la siesta al prado. Cuando
llegó la madre y vio que el lobo se había comido a sus hijos se puso a llorar,
pero salió el pequeño detrás del reloj y juntos fueron a salvar al resto de
cabritillos a la pradera. Mientras el lobo dormía, la mama y el pequeño
tuvieron la idea de abrir al lobo mientras estuviese dormido, sacar a los
cabritillos y en su lugar meter piedras para que pensase que seguía con los
cabritillos en el estómago. Poco a poco, fueron sacando a todos los cabritillos
hasta que ya no quedo ni uno, y entre todos metieron las piedras dentro de la
barriga del lobo y le cosieron. Cuando se despertó el lobo de la siesta, se
sintió muy hinchado y fue a beber agua al río y del peso de las piedras se cayó
al agua y ahogo. Y así fue como los cabritillos vivieron felices y la aldea se
quedó sin lobo.
PREGUNTAS DESPUES DEL CUENTO
Después de contarles este cuento
les haría unas preguntas como por ejemplo; si les ha gustado el cuento, qué ha
sido lo que más les ha gustado, qué hubiesen hecho ellos si entra el lobo a
casa, qué hubiesen hecho si fueran el cabritillo pequeño y cómo se imaginan a
los personajes.
Para prepárame la actividad, me
leí varios cuentos de los hermanos Grimm (Hansel y Grettel, Caperucita…) pero
este fue el que más me gusto, porque creo que no es tan conocido como otros. Se
lo conté a mi hermana una vez y me dijo que, para hacerlo mejor, podía cambiar
las voces al hacer de lobo con la voz grave, y luego el lobo con la voz dulce
cuando come tiza; para que los niños perciban la diferencia. También me dijo
que podía hacer ruidos con la mesa cuando llaman a la puerta (toc, toc, toc) y hacer como que asomaba
la patita por debajo de la puerta. Le volví a hacer la representación con sus
correcciones y me dijo que le gustó mucho.
APORTACIONES A LA ACTIVIDAD EN CLASE
Luego, en la actividad de clase
me hicieron distintas aportaciones. La primera vez que hice la lectura, me
dijeron que podría dejar más pausas concretamente después de contar algo
importante (esperar dos segundos y seguir) y me pusieron de ejemplo cuando el
lobo consigue entrar a la casa de los cabritillos. También me dijeron que podría
hacer una introducción hablando de la casa de los cabritillos, de la aldea…
para poner a los niños en situación.
La segunda vez que hice la
lectura, me dijeron que les gustó mucho la entonación, como lo conté, las
pausas para que puedan seguir la historia, los sonidos para introducirles en el
cuento. También me dijeron que podría preguntar sobre el molinero, sobre qué
les parece su actuación.
La tercera vez que hice la
lectura, lo hice con una de las chicas con las que lo había hecho la primera
vez (no se podía hacer de otra forma en ese momento) y me dijo que había
mejorado mucho desde la primera vez. En esta tercera vez no me dijeron nada
especial.
CONCLUSIÓN
En conclusión, la practica de
contar cuentos me parece bastante interesante porque así aprendemos con se puede
hacer mejor, quitarnos los “nervios” de las primeras veces y también ver como
realizan nuestras compañeras las lecturas y las narraciones de libros.
También he de decir, que he
aprendido también las otras dos estrategias que no hice yo para contar cuentos
en clase. Me parece que la realización de esta actividad y ver como mis
compañeros lo hacían ha sido fundamental para ello. Me parece necesario
utilizar las tres estrategias para que los niños las disfruten y vean las
diferencias de cada una de ellas.
Además, creo necesario que tengamos muy en cuenta la importancia que tenemos nosotros, como futuros maestros, de introducir a los niños en el mundo de la lectura y la narración. En mi opinión, no hay mejor forma de hacerlo que a través de su disfrute y de que vean la hora del cuento como una hora mágica donde su imaginación y fantasía puede volar y pueden participar.
En mi futura profesión, tendré muy en cuenta todo lo que aprendí en este taller para hacerlo lo mejor que pueda y que los niños disfruten de esta hora.
En mi futura profesión, tendré muy en cuenta todo lo que aprendí en este taller para hacerlo lo mejor que pueda y que los niños disfruten de esta hora.
¡Hola Cristina! Creo que te has adaptado perfectamente a todas las correciones que te faltabana.
ResponderEliminarLo que más me ha gustado es que siempre te has referido a tu futuro profesional.
¡Un saludo!
Vale.
EliminarMuy bien.
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